Diversidad funcional o la autogestión individual de nuestras vidas.

4 noviembre 2011

La marabunta.

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 15:44

Por Mª Ángeles Sierra.

La incertidumbre política y económica mundial es cada día más preocupante. Todos nuestros derechos, todos nuestros esfuerzos, todas nuestras aspiraciones para desarrollar una vida digna y de calidad recaen en manos del poder del 1% de la población que es el que controla y domina la capacidad productiva, económica, política y social en beneficio fundamentalmente de sus propios intereses personales.

La geografía mundial está siendo sibilinamente recolonizada por el despiadado poder capitalista mundial dispuesto a reducir a la humanidad a su mínima expresión y parece que lo está consiguiendo.

Pese a que el mundo se une intentando globalizar su protesta y aprovecha las nuevas herramientas tecnológicas existentes para intentar hacer frente a estas brutales situaciones, aun no es suficiente para derribar las fuerzas del devastador poder que se nos viene encima.

En España, educación, salud y muy especialmente dependencia, están sufriendo un duro ataque por parte de estas doctrinas neoliberales. ¿Qué podemos hacer nosotros que somos como un grano de arena en medio del desierto?

No es que quiera ser pesimista, sino que quizás si queremos conseguir y contribuir a hacer algo grande, tan grande como defender y apuntalar de una forma eficaz nuestros derechos, debemos de empezar por sentirnos muy pequeños, además de muy libres y dispuestos. Pero también hemos de aprender a identificar, rechazar y atacar de un modo muy determinado cualquier instrumento inmediato que sirva para retroalimentar ese despiadado y opresor capitalismo sanguinario.

El derecho a la educación gratuita y de calidad, a la salud gratuita y de la calidad y a vivir en  situación de dependencia con toda la dignidad que cabe esperar y elegida libremente por quienes viven en esa situación de dependencia, son derechos básicos que junto con el derecho a una vivienda digna y a un empleo digno y a unas prestaciones sociales dignas, ante nada y ante nadie, deberíamos dejar arrebatarnos.

Quizás uno de nuestros primeros deberes, sea el de desposeernos de ese cúmulo de encubrimientos inconscientes heredados que por mor de absurdas nostalgias, nos sigue ofuscando.

La situación que vivimos no es un asunto que se pueda reducir a la batalla entre socialistas  y populares o cualquier otro partido inmerso con posibilidades dentro del abanico electoral. Está en juego nuestra supervivencia y algo más grande si cabe, nuestra independencia y libertad. En definitiva está en juego nuestra propia identidad, tanto de una forma física o tangible como moral.

Quizás nos ha llegado el momento de aprender a convertirnos en hormigas guerreras, hormigas legionarias y marabunta sin necesidad de construir ningún hormiguero permanente, creando así colonias de personas dispuestas a atacar la presa del capital en cualquiera de sus formas y en masa.

El poder de la tecnología y el poder del pensamiento, al menos y de momento, nos acompañan.

3 agosto 2011

No hay palabras para avergonzarse de las autoridades.

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 13:34

“Los laicos estamos pagando la mutilación del pensamiento libre”

José Luis Sampedro.

20 octubre 2010

Perdonándome mis lágrimas o regándome el alma.

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 13:51

Es fácil esquivar la lanza, más no el puñal oculto.

(Provervio Chino)

Perdonándome mis lágrimas o regándome el alma.

Mª Ángeles Sierra.

Pensar es sencillo, además de necesario. Lo difícil es aprender a compartir los pensamientos, con la naturalidad que  da la inocencia, participándoles con los demás sin temor. Es la siempre absurda fuerza de la crítica y la incomprensión la que habitual e inmerecidamente nos paraliza y aprisiona. Ese puñal oculto que tantas veces sin saberlo, esgrimimos contra nosotros y hacia dentro.

Tras meses encerrada en la tortuosa prisión que envuelve mis pensamientos; curando mis heridas, calmando mi dolor, envolviendo y ya para guardarlos, mis recuerdos, sigo sin saber si algo de mí se ha ido para siempre, o por el contrario he vuelto a recuperar a la persona que era, aunque ya no importa.

Todo ha sido confusión y recuerdo. Todo ha sido duda, que ahora se ha convertido en calma, aceptación e indiferencia.

Cada realidad es como es y no puede ser de otra manera.

Solo basta con aprender a vivir con ella, aceptando que algunas pretensiones no tienen cabida porque se escapan entre los dedos de otras realidades diferentes, que no por ello dejan de ser.

El camino es amplio, largo, duradero y solo hay que sentir la tierra bajo la planta de los pies y seguir recorriendo sus tramos, avanzando con el devenir paisajístico que a mi lento paso iré encontrando y saboreando para preñarme de otras nuevas realidades siempre masticables, siempre digeribles, siempre transformables, siempre mejorables, que la humanidad me irá susurrando.

Posiblemente haya sido cruel conmigo misma, porque no supe preservarme a tiempo de todas y cada una de las tormentas que cayeron sobre mí y que veía aproximarse. Pero ya es tarde para lamentaciones y sería cobarde, además de inaceptable, reprocharle al antojado cielo sus naturales variantes.

Detuve demasiado el tiempo de mi rítmica andadura, añorando e intentando recuperar tiempos ya irrecuperables porque son tiempos pasados y el pasado no regresa más que en el recuerdo y la añoranza.

Vi con mucho dolor como los amigos inventados  que nunca tuve y creí tener poco a poco me fueron dando la espalda, quizás porque fui yo quien vino a demostrar que nadie podía esperar de mí, lo que yo misma de mi no esperaba, descubriendo con ello, que si acaso solo yo me di la espalda porque llevada por un espejismo ilusorio, cambié parte de mi pauta, esperando de aquellos, tanto como de mi esperaban. Es decir, me envolví en mi propia trampa.

Me convertí en el elemento acusatorio y en la culpabilizada de una serie de absurdos desmanes que ni yo misma imaginaba por lo que vi recorrer por todo mi cuerpo la rabia y el dolor tan similar a la que siente un lobo herido, atrapado en una trampa,  en medio de una oscura noche infranqueable. Tras un leve aullido guardé silencio, me refugié en la oscuridad mientras fui lamiendo mis heridas una a una hasta curarlas.

Llegué a comprender el significado y la composición de cada lanza, mientras la luna me iluminaba y me descubría que a fin de cuentas no soy más que una hembra enamorada, que siempre estará sola librando una batalla.

Lo difícil es esquivar el puñal oculto y no la lanza. Lo difícil es llegar a comprender y a perdonarse tantas lágrimas secadas, las mismas que  fueron regándome el alma.

28 junio 2010

Lectura para la reflexión.

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 12:36
A la memoria de un maestro con mucho pedigrí.

Por Vagabundo tras la libertad.

Hoy descubrí un artículo titulado”Maestros con pedigrí” que dice así:

Se aproxima el final de curso, fechas en las que las evaluaciones comen a los profesores y hacen temblar a los alumnos. Desde mi punto de vista, y así lo he practicado siempre, es necesario que demos oportunidad a los alumnos para que ellos también evalúen nuestra gestión como profesionales. Tal vez pueda resultarnos muy drástico el procedimiento pero yo creo que hay que afrontar la realidad y saber cómo nos ven, cómo nos sienten… Ellos y ellas son, sin duda, el mejor espejo donde mirarnos y descubrir tanto nuestros defectos como nuestras virtudes. Hace unos años escribí para una revista portuguesa un artículo con este mismo título, maestros con pedigrí, porque, efectivamente, como para todo, se precisan cualidades naturales, raza para ejercer de forma exitosa el magisterio. No se trata tan sólo de más o menos estudios sino de ese sexto o séptimo sentido para saber, intuir el qué y el cómo actuar. En dicha revista citaba mis principios básicos para rotular en nuestro brillante título de maestros: Un maestro jamás debe humillar a un alumno y mucho menos delante de los demás alumnos. Un maestro siempre debe prever una salida airosa para cualquier tropiezo, o excusa de los alumnos. Un maestro jamás debe intentar hacer de los alumnos una copia de sus gustos. Un maestro debe olvidarse de la suma porque jamás un alumno más otro darán por resultado dos. Un maestro no puede ser "sastre" de talla única porque no hay vestidura válida para dos. Un maestro jamás debe quedarse en la superficie, anatematizando el "oleaje" sino que su mirada debe profundizar en las inmensas maravillas de los fondos. Un maestro es, y no puedo extenderme más el hombre o la mujer que tolera, acompaña y, sobre todo, ama a sus alumnos sin excepciones.
Isabel Agüera.

Fuente: http://blogmanueldorado.blogspot.com/2010/06/maestros-con-mucho-pedigri.html

En consonancia con lo que se expresa me vino a la memoria el recuerdo de un hombrecito rechoncho por su edad avanzada y su escasa altura, mitad abuelo mitad maestro, pero en esencia una excelente persona.

A la memoria de D. Fernando Civantos Morales, mi mejor maestro y enseñante, al que conocí con apenas 8 años.

Tristemente, pocos otros colegas suyos se le parecieron, sobre todo en esa época de palmetazos, varas de olivo cimbreantes y domadas por el uso; tiempo infinito sobre todo al soportar el excesivo peso de biblias y enciclopedias Álvarez en cruces, cual balanza arrinconada y de rodillas cuando la tabla de multiplicar correspondiente no se había repetido reiteradamente; cuando las cuestiones correspondientes al fuego eterno e imperecedero junto al diablo no se habían repetido al pie de la letra, aunque nuestra ignorancia amplificada no nos permitiese ni siquiera argumentar, preguntar o dudar sobre las deidades o incluso cuando la pobreza te había castigado a no llevar un material solicitado; incluido hacer gimnasia en calzoncillos tras comprobar que determinados maestros no tenían una consistencia ética y social acorde con la pobreza de muchas familias; pagando esos muchachos y siendo fuente de burlas, vejaciones y ridiculizaciones… Eran las consignas rígidas de una Educación que poco ha madurado, aunque haya cambiado en las formas, pero poco en el fondo.

Fuente imagen: http://www.nuevalibreria.com/archivos/libros_d_siempre/enciclopedia_2grado_ANTONIO_ALVAREZ.JPG

Aunque franquista y defensor del clero, Don Fernando supo transmitirnos a muchos niños la devoción por la lectura y la motivación mediante especies de juegos y concursos, aún no conocidos ni siquiera en aquellas contadas televisiones castigadas a una monocadena en blanco y negro, donde el estímulo de adelantar puestos en la clase y la ilusión y motivación por preguntar nos hacía fácil y entretenido ese aprendizaje efectivo y jamás caduco. Tras bellas historias, muchas veces narradas los sábados por la mañana antes de sufrir un sermón obligado en la Parroquia correspondiente y donde la desidia y el aburrimiento generalizados actuaba como un notable dispersador de atención; siendo la atracción principal observar a algún maestro cómo se limpiaba las orejas, las fosas nasales o la constante apertura de boca, mientras algunos compañeros no se apartaban de él; esos que le limpiaban el Seat 850 verde a la hora del recreo; mientras de vez en cuando, el cura con un tono elevado y visceral, al observar nuestra poca atención generalizada, nos despertaba de ese conteo hacia las veces que susodicho maestro bostezaba, se llevaba el dedo a su napia o en el mejor de los casos lo usaba como sacacorchos para limpiarse el exceso de cerumen.

Era curioso como a Don Fernando, el que nos imponía un crucifijo en nuestros labios al entrar en nuestras clase, cual obispo al uso, y dejarnos la primera hora de pie para aprender jugando a responder, jamás ví que ningún pupilo suyo le intentase criticar ni hacer burlas de alguna característica suya; por ejemplo su escasa estatura. No había, como ahora se insiste tanto una proclamación de autoritarismo. Era simplemente un proceso generado durante sus muchos años de docencia decente y pedagógica lo que había encumbrado a un excelente maestro a la categoría de AUTORIDAD, que no de autoritarismo, pues excepto en una ocasión que perdió los nervios en clase y mediante un tono de voz elevado se hizo de nuevo con el respetable, lejos de palmetas, tirones de orejas, desprecios por algún alumno particular en presencia de toda una clase asustada e incluso la ira desproporcionada de alguna vara “cimbriona” guiada por una mano insensible y poco escrupulosa.

A pesar de no ser defensor de la República como en el magnífico tema de Andion y las imágenes de “La lengua de las mariposas”) y ni mucho menos esconder su proximidad con los “Alzados”; sin duda alguna, Don Fernando, era un maestro con mucho pedigrí, amante de su trabajo y, seguro, de sus niños.

Va por él.

 

24 junio 2010

Es tan fácil y divertido dar a los demás lo que queremos que nos den a nosotros mismos, como duro y difícil es recibir y dar todo lo contrario

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 11:34

 

Enviado por Teuladí

19 junio 2010

Los testigos cómplices o testigos mudos

Filed under: Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 11:40

25 octubre 2009

En lucha contra el estigma en salud mental

Filed under: ¿Piratas o carroñeros?, Denuncia pública, Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 13:30

Por Walden el Nikosiano

Saludos a todos-as aquellos-as que se hayan detenido en esta causa:

Se conoce como estigma a todo aquella etiqueta que representa un rechazo por parte de la sociedad hacia un sujeto, en tanto que este sujeto pertenece a un grupo determinado de la sociedad.

Diría, y me baso en la pura y llana experiencia personal, que una persona diagnosticada en el ámbito de salud mental carga con un peso, que va más allá del sufrimiento que conlleva el trastorno propiamente dicho o la medicación y los efectos secundarios que esta representa. Cuando uno es diagnosticado de depresión su entorno mas directo puede pensar que el afectado es un vago, cuando el diagnostico es de bipolaridad puede pensar que el afectado es incontrolable y, del mismo modo, en un caso de TLP puede pensar que que solo quiere llamar la atención y hacer sufrir a su entorno más directo. La cosa por desgracia no se queda aquí. Cuando el diagnostico es de esquizofrenia el pensamiento más común, el que pervive en el imaginario colectivo de nuestra cultura desde hace mucho siglos es el de peligrosidad, al ser esta (la esquizofrenia o los síntomas que se relacionan con este diagnostico) pensados como impredecibles y por tanto potencialmente peligrosos.

El desconocimiento sobre la locura -a partir de ahora la llamare así- sea del tipo que sea es enorme. La ciencia se esfuerza por encontrar causas, pero hasta el día de hoy solo encuentra hipótesis, de lo que se desprende, con una lógica casi matemática, que es lógico que que no hayan encontrado cura para dichos males sino paliativos que cronifiquen el mal, eso si, haciéndolo más llevadero, para los afectados tanto en primera como en tercera persona.

El loco, los locos como yo, somos vistos como peligrosos, por nuestra tendencia a salirnos del discurso oficial, por nuestra facilidad para movernos en los horizontes que desdibujan los limites y de-construyen conceptos como el de normalidad, relativizándolos, intentando desnudarlo de sus ropajes artificiales, sus modas, sus tendencias, sus falsas creencias y concepciones.

La locura es difícil de describir, porque existen tantas locuras como sufrimientos. Partiendo de la premisa budista que reza: "nosotros somos uno, somos todo, somos nada", existen tantas esquizofrenias como individuos, tantas bipolaridades como circunstancias, tantos trastornos como certezas.

A modo de ese junco que es doblegado por el viento pero extiende sus raíces de forma firme y profunda, el ser humano, más allá de cualquier diagnostico circunstancial debe hacer un esfuerzo para hacer crecer sus raíces en el campo del respeto y la comprensión. Para ello es necesario de un saber mirar, de un saber escuchar. La empatía hoy en día, en una sociedad que tiende cada vez mas hacia los individualismos más extremos, se convierte en una herramienta necesaria, una cualidad que hemos de fomentar, para poder comprender los retos y necesidades de un mundo que se escapa siempre, como el correcaminos, del afán de control.

La diversidad de pensamiento es, si se muestra la predisposición necesaria, la mayor riqueza de la humanidad. La locura en la inmensa mayoría de sus casos se puede pensar como aquellos ideales que, silenciados por el rechazo, por el aislamiento, por la soledad, como una bola de nieve que mientras descendía por la ladera del monte crecía en un discurso antes que desestructurado sería más correcto denominarlo solipsista.

El loco no es peligroso en tanto que es loco, y en tanto que es humano resulta menos peligroso que una persona absolutamente cuerda. Aprendamos a comprender más allá de las noticias que deforman la realidad que existe entre la locura y la peligrosidad (sólo un 3% de los delitos cometidos en Europa son cometidos por personas con trastorno mental) aumentando así el estigma y la carga de las personas que, como yo sobrellevamos el peso de un diagnostico y de una horrible etiqueta. No tengamos miedo de nuestra locura, ni la veamos como extraña, todos cuadramos en algún síntoma de los manuales de psicopatología, la locura, como representaban los antiguos bufones, era el último reducto del pensamiento libre e individual.

Seamos individuos libres y liberemos en nuestra locura sana en estado puro.

7 octubre 2009

Campanas por la Gripe A

Filed under: Acontecimiento médico., Reflexiones — teuladi @ 0:23

 

TERESA FORCADES, doctora en Salut Pública, hace una reflexión sobre la historia de la GRIPE A, aportando datos científicos, y enumerando las irregularidades relacionadas con el tema.

Explica las consecuencias de la declaración de PANDEMIA, las implicaciones políticas que de ello se derivan y hace una propuesta para mantener la calma, así como un llamamiento urgente para activar los mecanismos legales y de participación ciudadana en relación a este tema.

 

CAMPANAS POR LA GRIPE A from ALISH on Vimeo.

27 septiembre 2009

Mucho amor y muchas gracias, además de toda mi alma.

Filed under: Reconocimiento, Reflexiones — Mª Ángeles Sierra Hoyos @ 10:06

En ocasiones la vida nos enfrenta a grandes reveses difíciles o duros de afrontar, pero que finalmente son siempre afrontables porque forman parte de la naturaleza misma. Situaciones que por lo que tienen de humanamente especiales nos ponen al límite de nuestras habituales posibilidades. El tiempo pasa, la vida se regenera y transforma. Querámoslo o no, poco a poco y hasta la transformación definitiva, nos cambia.

También en ocasiones el miedo a lo inesperado, al cambio, a la transformación, a lo inevitable, se apodera de nosotros, sin siquiera darnos cuenta. Es cuando queremos darnos cuenta, cuando nos descubrimos a todas luces descontrolados, incapaces de asumir el dominio sobre nosotros mismos y nuestras emociones. Es cuando el desorden se ha apoderado de nuestra templanza, de nuestro sosiego y de nuestra calma, cuando descubrimos, -aunque no siempre-, cuanto pasa, que no es ni más ni menos que cuanto había  de suceder.

No han sido pocas las veces en que debido al cúmulo de circunstancias que me han rodeado, me he sentido así, perdida, disconforme, dolida, indispuesta, para acabar finalmente combatiente y  reconfortada.  No serán pocas posiblemente las ocasiones en que vuelvan a repetirse este tipo de accidentales situaciones a las que habré de enfrentarme, cada vez con más y mejor preparación hasta que las fuerzas fallen.

Momento a momento la vida se construye, se destruye y se reconstruye nuevamente, sin que siquiera seamos capaces en la mayoría de ocasiones de percatarnos de ello, hasta que no llega ese tiempo de meditación o de reflexión unas veces espontáneo y otras forzado a través de las circunstancias, que nos hace sentir la vida con distinto aroma, color y sabor.

Es en los duros momentos donde una siente quienes con su propia identidad ocupan el lugar de la verdadera familia y los verdaderos amigos; el espacio de las personas nobles, que te ofrecen y reciben con su entrega la dosis necesaria de apoyo, compañía y comprensión que todos en varios momentos dados de la vida, sin excepción, necesitamos.

Es preciso reír, llorar y reflexionar para sentir, como es preciso sentir para llorar, reír y reflexionar plenamente. Pero lo más importante y difícil tal vez sea, aprender y a su vez enseñar a mantener la serenidad, la paz, la coherencia, la ecuanimidad y la calma.

A cuantos en algún momento de mi vida o de otras vidas contribuyeron y seguirán contribuyendo a mantener esas fuerzas que no son ni más ni menos que el apoyo en el reconocimiento y dominio de las emociones y el consuelo, desde la autovigilancia, mucho amor – símbolo de esas fuerzas- y muchas gracias.

A la persona que me motivó esta entrada, que es el hombre de mi vida, toda mi alma.

M.A.S.H

18 septiembre 2009

De: saciados, para: hambrientos

Filed under: Reflexiones, Reivindicación — teuladi @ 13:03

 

Papelera de reciclaje

 

¿Suprimirías este mensaje o lo enviarías?

De saciados para hambrientos

18 Sep 2009

Compartir: facebook twitter meneame delicious

De: Saciados

Para: Hambrientos

Asunto: No tenemos vergüenza

Debería de darnos vergüenza luchar por una silla en el G-20 o ponerle inyecciones de liquidez a los bancos: el número de hambrientos en el mundo acaba de superar los 1.000 millones. Ese G-20 en el que echamos ampollas por sentarnos ha dejado de dar, desde 2005,  23.000 millones de euros anuales. Con menos de un 1% de lo que en los países ricos les hemos regalado a los bancos y al sistema financiero se habría resuelto el problema. Sigamos llenándonos la boca de solidaridad, mientras hay mil millones de personas sin nada que llevarse a la boca.

 

¿Qué harías tú?     Borrar Enviar

Este mensaje ha sido borrado 2 veces
Este mensaje ha sido enviado 19 veces

Older Posts »